Una gota Skype, rociar con trocitos de Nokia, adereze con mucho ARM y sirva sobre un Windows 8 bien liviano...

La receta de Microsoft parece inspirada por el chef Ferran Adriá en su restaurante El Bulli. Exótica, excéntrica, abrumadora. Sólo me olvidé del ingrediente secreto de Microsoft: Su demoledora capacidad de mercadear y masificar productos. Puede que esté de tercera ahora y se vea poco brillante comparada con las relucientes e innovadoras manzanas de Apple o incluso ante la \”abuelita electrónica\” que es IBM, empresa centenaria que ahora reporta exitosos resultados en su estrategia global y ahora es la número dos en cotización.

$\"\"$

También puede ser una mezcla explosiva que sólo lleve a la hecatombe móvil a todos los ingredientes…

Pero puede funcionar. Suena interesante ver cómo hará que encaje Skype en todo este modelo sin causar recelo entre los operadores móviles las cuales, en Colombia por lo menos, la ven como un competidor y la bloquean dentro de las tiendas de aplicaciones de RIM, Andorid y Apple, pero que se puede convertir en una valiosa herramienta para extender servicios de voz de bajo costo en mercados donde la voz es un dato más y no viven de la voz con modelos como los minutos prepagados con colmillos de vampiro de países como el nuestro. O por el contrario, permitirá extender servicios de datos en mercados vírgenes donde Nokia se vende como pan caliente, como África. Así que con Skype podría suplir los mercados de ambos extremos de la curva.

Puede funcionar también porque, a pesar del tobogán en el que se montó la cotización en la bolsa Nokia y esté a precio de \”outlet\”, los clientes la recuerdan, la respetan e incluso le tienen cariño. Además no deja de ser la que más vende en el mercado de los teléfonos móviles convencionales. Un poco de inteligencia, sólo un poco más y este mercado sería más rentable y atractivo. Ahí podría funcionar una estrategia de mercadeo agreste e ingeniosa generada desde Redmond.

$\"\"$

Y por último, puede funcionar por la versatilidad y la eficiencia en costos que generaría el desarrollo de un sistema operativo de Microsoft que funcionara sobre la arquitectura ARM, con lo cual trabajaría en tablets y teléfonos inteligentes sin sonar forzado, con las exigencias de duración de la batería que buscan los usuarios, con la inmediatez que otorga ARM al uso de estos productos en contraposición a la arquitectura x86 que nos ha hecho perder millones de horas/hombre en todo el planeta con su tradicional \”espere un buen tiempo y le cargo el sistema operativo, las actualizaciones, las aplicaciones…\”. Esto pondría en desventaja a Intel, empresa que no parece bien preparada para luchar contra las bondades de ARM. Pero peor podría quedar AMD, que ha menospreciado la movilidad de manera continuada a lo largo de toda la década pasada. En realidad espero una mejor respuesta de Intel e incluso sorpresas el año entrante.

Sólo extraño el cierre del nombre OVI, que podría haberse quedado para albergar las aplicaciones de Nokia sobre Windows Phone 7 y Windows 8, pero los \”si hubera\” nunca han servido de nada. Ya está cerrada y es parte del pasado. Esto no significa que no haga falta una tienda de aplicaciones, todo lo contrario. ¿Qué va a hacer Microsoft para suplir esta falencia? ¿Usar vudú para revivir Zune? ¿Convertir a Windows Media en un portal de aplicaciones? en fin.

Puede que esta receta se enfríe y no guste a unos comensales que son cada vez más y que también conocen mejor otras plataformas. Puede que más de dos años de ventaja sean suficientes para no querer probar ninguna receta adicional. Pero puede que funcione. las opciones están en un 50/50.

A manera de posdata, podría preguntar ¿Alguíen ha visto los WebOS de HP en algún lugar?

$\"\"$

Una gota Skype, rociar con trocitos de Nokia, adereze con mucho ARM y sirva sobre un Windows 8 bien liviano…

Deja un comentario Cancelar respuesta